Hidrógeno verde y aplicaciones

El hidrógeno verde (H2V) y sus derivados ofrecen grandes ventajas para la descarbonización del transporte pesado y de los procesos industriales que por su alto consumo energético no pueden electrificarse y dependen de fuentes de energía fósiles, como el petróleo o el gas licuado de petróleo (GLP).

Chile, además, enfrenta el desafío de insertarse mundialmente en las cadenas de valor que se desarrollarán para descarbonizar las economías. Tiene la oportunidad de exportar combustibles y energía limpia, implementando tecnologías de hidrógeno verde.

Por ello, junto a Fraunhofer ISE, Alemania, estamos trabajando en el desarrollo de combustibles sintéticos verdes a partir de H2V solar y en hacer viable su aplicación, eficiente y rentable.

Análisis pre-factibilidad H2V y derivados

xxxxxxxx

  • xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
  • xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
  • xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx

Electromovilidad

Captura de CO2 y Combustibles Sintéticos

El CO2 que se captura desde la atmósfera o desde procesos industriales, puede ser luego combinado con H2V, como base para producir combustibles sintéticos u otros insumos químicos, a partir, por ejemplo, de metanol verde.

De esta forma, se obtienen combustibles carbono neutrales, que pueden ser usados directamente en motores o procesos térmicos ya existentes, con modificaciones menores y en algunos casos sin modificaciones.

¿Por qué combustibles sintéticos?

  • Es posible utilizar la infraestructura existente, ya que los combustibles sintéticos poseen características similares a los combustibles de uso tradicional.

  • Es posible aprovechar las flotas de vehículos disponibles, debido a que se requieren modificaciones y ajustes menores, especialmente si se utilizan combustibles sintéticos en motores de combustión interna.
  • Como el hidrógeno es un producto intermedio en la cadena Power-to-X, mientras se producen y se aplican combustibles sintéticos, la industria de crea capacidades y capital humano en torno al H2V.
  • Debido a las facilidades de almacenar y transportar los derivados del hidrógeno, compuestos como el metanol o el amoníaco verde representan carriers energéticos interesantes para exportar a mercados como el europeo.
  • Si bien es posible sintetizar combustibles similares a los fósiles de uso convencional, también es posible producir metanol y amoníaco, compuestos que ya tienen un mercado establecido (demanda).