Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y contribuir a la economía circular son los objetivos de esta iniciativa desarrollada por Fraunhofer Chile y financiada por Corfo a través de los fondos Crea y Valida.
La industria de producción primaria de aluminio genera 1.100 millones de toneladas de gases de efecto invernadero anualmente, siendo responsable del 2% de las emisiones de estos a nivel mundial. Su reciclaje convencional disminuye en un 95% la energía necesaria para el proceso y, por consiguiente, sus emisiones. A pesar de ello, este no está libre de emisiones, liberando al medio ambiente media tonelada de CO2 por cada tonelada de aluminio reciclado.
La fundición del material es la que compromete el mayor consumo energético y de ahí surge la idea del proyecto RENOVAL, un horno solar de reciclaje de aluminio, construido por los ingenieros investigadores de Fraunhofer Chile.
A través de la radiación solar concentrada directamente en un horno ubicado en el punto focal se funden desechos comunes de aluminio como latas de bebida, marcos de ventanas, pistones de motor, entre otros, sin necesidad de otras fuentes de energía como combustibles fósiles.
Luego de varios meses de trabajo, a lo largo de distintas etapas de I+D, se han ido superando los desafíos asociados al diseño y la manufactura, al ensamblaje, pruebas y puesta en marcha del prototipo, alcanzando la fundición de aluminio con energía solar.
El objetivo final es que el prototipo sea escalado con un equipo construido y fundiendo diversas aleaciones de aluminio a diferentes capacidades y, la meta mayor: liberar la dependencia de los combustibles fósiles que posee actualmente el proceso de fundición de metales y aportar a la economía circular desde la sustentabilidad y las energías renovables.
El proyecto es financiado por Corfo a través del fondo Crea y Valida.